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Altazores

Sergio Aguirre

Vazques Sound

RIPTIDE

I was scared of dentists and the dark

I was scared of pretty girls 

and starting conversations

Oh, all my friends are turning green

You're the magician's assistant in their dream

 

Oh, and they come unstuck 

                 

Lady, running down to the riptide

Taken away to the dark side

I wanna be your left hand man

I love you when you're singing that song 

And I got a lump in my throat                

'Cause you're gonna sing the words wrong

RESACA

 

Tenía miedo de los dentistas y la oscuridad

De las chicas lindas, y de comenzar conversaciones 

Oh, todos mis amigos se vuelven verdes 

En sus sueños, tú eres el asistente del mago  

 

Oh, todos ellos despegan 

Lady, corren hacia la resaca,  

llevados hacia el lado oscuro 

Quiero ser tu ayuda, tu mano izquierda 

Te amo cuando cantas esa canción 

y tengo un nudo en la garganta 

porque cantas mal cada palabra  

¿Qué harás, mientras construyes 

a tu alrededor un mundo inhabitado? 

Tejer las horas en busca de ti mismo, 

encontrar tu propio rostro, aún antes,  

de que sea olvidado.

 

Me dijo Ixchel si estaba seguro de lo que hacía. Yo le dije que sí. Que casi todo lo que me proponía lo podía lograr con un poco de tiempo y paciencia.  

Me dijo que todo lo que se proponía lo podía lograr con un poco de tiempo y paciencia. Yo le dije que en la era del Internet, los videos de Youtube con más de 2 minutos de duración escasamente se veían completos a menos que fueran videos musicales. 

Así que Ixchel le dijo que a partir de las estadísticas de Youtube, hoy en día lo que menos había era tiempo y paciencia. 

Siguió con su empeño. Un día, llegó a la escuela con esto que ven. 

¿Seguro? 

Sí claro. Voy a hacer esto. Voy a hacer todo lo que me proponga. 

Hube de llamar a sus papás. Finalmente, soy el Director y a veces, no tenemos más alternativa que llamar a sus papás. Número ocupado. 

Finalmente, soy el Director y hago todo lo que puedo, hago mi parte, aún más que eso, muchas veces más que eso, mucho más cuando aparecen situaciones como esta. 

No es que no quisiera que lo hiciera. Es que el Director no estaba seguro de lo que habría de suceder. 

Lo tuve en clase muchas veces. Lo tuve en clase algunas veces. Nunca lo tuve en clase. 

Tiempo y paciencia. Es todo lo que necesito.  

Cuando salí de mi casa, cargando con todo esto, no fue fácil explicarles lo que haría. Por fortuna, las paredes solas, los muebles viejos, la pantalla y el estéreo no me hacen demasiadas preguntas. 

Tomó la calle, los vecinos lo miran. Nunca se había visto algo así. No fue difícil  juntar los materiales necesarios, en un lugar donde nadie mira y si mira, parece no darse cuenta y si se da cuenta, parece no darle importancia, y si le da importancia, parece no darle demasiada, porque la cosa así es y no vale la pena empeñarse por mejorarla, menos aún por cambiarla. Menos aún por cambiarla.  

Esto es lo que hay. 

Por eso voy a hacer lo que pienso hacer. Porque yo puedo. Porque sé que puedo. Creo que puedo. Sé que podré. Un poco de tiempo. Y paciencia. Y viento. 

PARACAÍDAS

Un paracaídas es, por lo general, un velamen de 7.3 metros de diámetro. Lleva un agujero en el centro para generar desaceleración y tras 3 segundos luego del salto, una vez desplegado en su totalidad, se logra descender a una velocidad de aproximadamente 5.2 metros por segundo. 

El primer intento conocido de lanzarse en paracaídas tuvo lugar en Córdoba, España, en el año 852, con éxito parcial, pues Abbás Ibn Firnás (se escribe así عباس بن فرناس), el hombre que saltó, sufrió algunas heridas al caer. El uso del paracaídas también fue sugerido por Leonardo da Vinci mientras vivía en Milán. A lo largo de la historia ha habido otros muchos intentos fallidos. El primer paracaídas práctico fue inventado hasta 1783. 

Felix Baumgartner, exmilitar austriaco, paracaidista y saltador B.A.S.E. (B de Building, A de Antenna, Span de Puente, Earth de Tierra, Risco, Acantilado) conocido por la particular peligrosidad de las maniobras que ha realizado durante su carrera. Baumgartner pasó algún tiempo en el ejército austriaco, donde practicó paracaidismo, incluyendo entrenamiento para aterrizar en zonas pequeñas. 

El 14 de octubre de 2012 batió tres récords históricos al lanzarse en caída libre desde los 38.969,3 metros de altura, después de haber ascendido en un globo tripulado a la estratosfera, alcanzando una velocidad máxima de 1357,64 km/h. en la caída. El récord de altura, lo rompió tiempo después el vicepresidente de Google, Alan Eustace, de 57 años, el 24 de octubre de 2014, saltando desde 41.425 metros, logrando alcanzar una velocidad máxima de 1.322 km/h, rompiendo la barrera del sonido, aunque sin superar la velocidad de caída, del récord de Baumgartner. Tampoco llevaba como patrocinador a Red Bull o alguna otra bebida energética, por lo que no tantos como hubiera deseado, se enteraron de su hazaña.  

Anónimamente, un hombre saltó desde las estrellas. 

Sí, casi todo esto, lo saqué de Wikipedia. 

 

NOTICIAS

Fue hace dos años. En 2013. En la Ciudad de Juárez, Chihuahua, es decir, en Ciudad Juárez, es decir, en lo que antes llamaron Paso del Norte, es decir, muy, muy lejos de acá, a casi tres mil kilómetros del sitio que hoy ocupamos, y a muchísimos más de cualquier otro sitio en el cual esto se cuente, dónde sucedió un evento extraño. 

 

Inspiradas en Serie de TV, inventan secuestro y luego se arrepienten 

24 de mayo de 2013 

Carlos Ramírez / Periódico El Mexicano 

Ciudad Juárez, Chihuahua.-Se inspiraron en la serie televisiva La Rosa de Guadalupe para llevar a cabo el autosecuestro de una de ellas tres jovencitas menores de 13 y 14 años quienes planearon quitarle dinero a la familia de una de sus amigas, para ir a comprar ropa a la ciudad de Chihuahua Capital, después de dos días de exigencia sin saber qué hacer, se arrepintieron y no hallaban como corregir su error, según admitieron, fueron mostradas como delincuentes ante los medios informativos y de esa forma celebraron el Día del Estudiante, en los separos de la Fiscalía General del Estado en la zona norte. 

Con el semblante triste, cabizbajo, sin atinar a comprender la magnitud de lo que hicieron, llorando incluso, sin huella de maquillaje en sus rostros, la cara de niñas las tres, cuerpecillos que aún no maduran, delgadas y vestidas como tal, una de ellas con la pantalonera de la secundaria Número Seis, a la que pertenecen, fueron detenidas por agentes adscritos a la Unidad Especializada en Justicia para Menores Infractores, los cuales descubrieron el engaño y arrestaron a las tres adolescentes.  

¿En dónde estás Altazor? 

Fue este mismo año. En 2015. En la Ciudad de Madero, Tamaulipas, es decir, en Ciudad Madero, es decir, en lo que antes llamaron Villa de Doña Cecilia, es decir, muy, muy cerca de acá, a menos de veinte kilómetros del sitio que hoy ocupamos, pero a muchos más de cualquier otro sitio en el cual esto se cuente, dónde sucedió otro evento extraño. 

 

Investigan a alumno que disparó una .45mm dentro de secundaria 

Erik Vargas 

Autoridades de Educación de Ciudad Madero ya investigan el caso de un adolescente que introdujo un arma de fuego de uso exclusivo del Ejército Mexicano a la escuela secundaria Melchor Ocampo e hizo detonaciones en el interior contra un árbol. 

Madero, Tam. / 11 de noviembre de 2015 

Esto ocurrió en hace dos semanas y al parecer no se había dado a conocer públicamente, hasta que trascendió en redes sociales y los padres de alumnos se inconformaron ante la dirección. 

Ante ello, la Jefa de la Oficina de Servicios Regionales de la Educación Irma Estela Segovia González, mencionó que se habló sobre el caso con el director de la escuela secundaria en donde ocurrieron los hechos pero éste le refirió que es una confusión pues lo que explotó fue un encendedor que traían los muchachos. 

En redes sociales fue publicado el hecho ocurrido en un salón de clases de la secundaria Federal Melchor Ocampo en la que un estudiante llevó el arma de cargo de su madre, quien es empleada de la Secretaría de Marina. 

Se trataba de una pistola tipo escuadra calibre .45 milímetros, la mostró a sus compañeros y disparó contra una palmera, y por fortuna no hubo estudiantes lesionados. 

 

En Tamaulipas niña de secundaria extorsionaba a sus compañeras de escuela 

Viernes 2 de octubre de 2015 

En una secundaria de Tampico se dio un caso en el que una niña estudiante de secundaria se dedicaba a extorsionar a sus compañeras de la escuela bajo la amenaza de mandarlas a golpearlas exigiendo la cantidad de 200 semanales como pago de cuota para no ser golpeadas. 

Tampico, Tamaulipas - La secundaria número 6 de Tampico, ubicada en la colonia Natividad Garza Leal, en el norte de la ciudad, era escenario de prácticamente una banda de extorsionadores, integrada por lo menos por dos niñas quienes a una compañera pedían cuota de 200 pesos por semana y si no cumplía la mandaban golpear. 

En la Colonia Morelos de Tampico, una alumna amenazó a la prefecta señalando que había pagado por que la secuestrasen. Que había pagado con “cuerpo”. 

En la Ciudad de Tampico, han surgido al menos dos casos de auto secuestro por parte de menores en menos de un mes. 

Hace unos meses. Hace unos días. Hoy mismo. En 2015. En nuestra propia casa, es decir, en nuestra propia casa, es decir, en lo que antes era nuestra propia casa, es decir, aquí, aquí, aquí, en el sitio que hoy ocupamos nosotros, pero (no se preocupen) a muchísimos kilómetros más de cualquier otro sitio en el cual esto se cuente, suceden eventos cada vez, menos extraños. 

 

Ojos ávidos de lágrimas hirviendo 

Labios ávidos de mayores lamentos 

Manos enloquecidas de palpar tinieblas 

Buscando más tinieblas 

Y esta amargura que se pasea por los huesos 

Y este entierro en mi memoria 

Este entierro que se alarga en memoria 

Este largo entierro que atraviesa todos los días mi memoria 

PRESENTACIÓN 

Tengo un libro. Me lo regaló mi mamá. Yo soy súper. Dicen que estoy guapo. Tengo cambios de humor. I was living in Michigan, but my parents get divorced and now i´m living here with my dad, sometimes I see my mom. Yo traigo brackets. Yo estoy tonto y me vale… quiero ser piloto aviador. No me gusta andar con el uniforme sucio. Juego futból… soy medio. No me interesa nada. Soy rebelde. Estoy embarazada. Soy alta. Me gusta hacer reír a las personas. Soy callada. Canto en inglés. Una vez maté a una persona. Soy emo. Me gusta hacer reír a las personas. 

 

YO SOY ALTAZOR

Soy yo Altazor 

Altazor 

Encerrado en la jaula de su destino 

En vano me aferro a los barrotes de la evasión posible 

Una flor cierra el camino 

Y se levantan como la estatua de las llamas 

La evasión imposible 

Más débil marcho con mis ansias 

Que un ejército sin luz en medio de emboscadas. 

En mitad de cualquier cosa, viene la realidad a distraerme. Me encierro en las posibilidades sin decidir cuál de todas es mejor. Ixchel me dijo que debía decidirme por algo. 

Le dije que debía decidirse por algo. Quiso hablarlo con su mamá pero el teléfono fue más importante para ella. Trató de romperlo. Hacer pedazos el ícono verde que distrae de las cosas importantes. Número ocupado. 

Nadie contesta del otro lado de la línea. Nadie está, en realidad, de este lado tampoco. 

Ahora tengo todo listo, con la determinación necesaria podré llevar a cabo mi gran solución. Seré visto, escuchado, mirado y admirado. Nadie pensó que sería capaz de hacer y sin embargo, estoy aquí, a punto de lograrlo. 

¿Habías visto alguien más extraño? Callado, llegó un día cargando un amasijo enorme. No entró a clases ese día, pero se miró pensativo durante los cortes de clase, esperando algo que nadie supo exactamente que era, hasta que lo vio suceder. 

¿Qué te pasa? ¿Por qué estás así? ¿En que piensas? ¿Es ese libro? ¿Es todo lo que has leído? ¿Es todo lo que has escuchado? ¿Es el parloteo incesante de historias escupidas desde todos lados? ¿Lo que viste en Facebook? ¿El estado del Whats? ¿Pusiste algo en el Twitter? ¿Pasó algo en el Snapchat? Dime algo… En este momento, no puedo recordar cómo te llamas, estás empezando a preocuparme. 

Le dije a Ixchel, luego de soportarle su insistencia: Cuando no te sientes vivo, necesitas hacer algo radical. Necesitas suceder. 

No sé quién le dijo eso. La soledad tal vez. 

La paredes mudas, la cancha vacía, el rebote solitario de un balón marchando por los aires, no lo sé. Alguien, algo, le dijo que tenía que suceder. 

 

Soy yo Altazor 

Altazor 

Encerrado en la jaula de su destino 

LO QUE HAGO CUANDO ESTOY SOLO

No hay edad alguna para conocer la soledad. Ella llega sola o te la traen a veces a domicilio. A todos nos ocurren cosas, pero no todos hacemos lo mismo con las cosas que nos ocurren. Lo que importa es lo que hacemos con las cosas que nos pasan. Cada quien busca llenarse los vacíos y hay quienes se refugian en quienes los aman para encontrarle sentido al tiempo pensado en futuro, vivido en presente o meditado en pasado. Pero ¿qué con los que nos quedamos esperando una luz en mitad de la borrasca? ¿Qué de aquellos que tratamos de no ser arrastrados por la marea de la resaca? ¿Qué de nosotros y de tantos más como nosotros? 

¿Seremos también llamados Altazores? 

Lo que hago siempre que estoy sola es encerrarme en mi cuarto con mucha comida y prender la tele. Si tengo miedo prendo la luz y me pongo a pensar en todo lo que he hecho mal. y recapacito y me cobijo hasta que llega mi mamá. A veces pienso demasiado en todo lo que hice y por el sentimiento o por coraje lloro. Mi mamá llega cansada o enojada o molesta, pero aún así me quedo a esperarla porque es mi mamá y la quiero mucho. 

Pongo música de Panda, canto, voy a la tienda, como Sopa Maruchan, agarro el cel y hablo con mi papá por Face, pero luego nos peleamos y me deja de hablar. Me voy casa de una amiga. Ahí llega mi novio, juega en el Xbox con el hermano de mi amiga y yo me acuesto a verlos jugar. Después me da un beso porque ya se va. 

Cuando estoy solo escucho bandas de rock. Tomo una escoba y toco como si fuera un bajo o una guitarra. También las almohadas son a veces batería. Bailo. Solo.  

Leo anime. Veo películas. Me preparo algo de comer. Juego con mi hermano. Escucho música mientras recuerdo cómo vivía antes y me pongo a llorar. A veces pienso como se sentirá matar a una persona, o como es la gente de cruel cuando tu eres gentil. Me pongo a contar las veces que lloré en el día. Cuando mi mamá no está, me hago de comer, me lavo los dientes, pienso en como deseo acabar con mi abuela. También pienso en que se siente tener a alguien que te quiere mucho. ¿Por qué como tanto? 

Juego videojuegos, respondo el whats, veo el Face, “hago la tarea”, le doy de comer al perro. 

Lo que hago cuando estoy solo es escuchar música, ver videos de música en Youtube, fumar marihuana, salir a practicar con mi balón de basketball para hacer un poco de ejercicio y sacar de mi sistema las impurezas de mi cuerpo. 

Juego videojuegos de zombis. Me gustan los videojuegos de zombis. O veo la tele hasta que me duele la cabeza. Ya que me duele la cabeza, me acuesto, y pienso en todo lo malo que he hecho. 

Cuando estoy sola estoy viendo muchas películas, escuchando música y tomándome fotos para el whatsapp o el Facebook. 

Veo películas de amor, por que el amor me conmueve. También platico por Face con personas que no conozco. Solo les envío la solicitud y platico con ellos así porque soy una persona muy tímida. Me siento solo aunque todos me apoyan. También siento que alguna vez me discriminaron mucho.  También tengo miedo al rechazo. A veces me toco. No masturbarme, solo tocarme. Tengo un diario escondido en un poste donde escribo lo que no le cuento a nadie. Cuando me muera, quiero que me entierren con él. Quisieran que entierren con mis recuerdos, en lugar de entregárselos a mi familia. 

Cuando estoy sola me pongo a imaginar mi futuro. Cuando estoy solo me pongo a pensar en por qué no le dije a mi papá que lo quería cuando tuve la oportunidad de hacerlo. Antes de que muriera. Hoy quiero que me vea feliz, siendo alguien en la vida. Por eso le echo ganas, empeño, al estudio. Pienso, cuando estoy sola, que esa puede ser mi forma de decirle que lo amaba. 

Cuando estoy sola tiendo a pensar, más bien, a atormentarme con todo lo que he pasado, que ha sido mucho, para tan solo tener catorce años. Me pongo a observar mis cicatrices. También me pongo a leer, a dibujar, a escribir. Podría hacerlo toda la noche escuchando música, saltando a veces sobre los muebles. Escribo en un cuaderno especial todo lo bueno y todo lo malo. Siempre he creído que solo así, uno puede sanar y sacar todo lo que tiene adentro. Me pongo a escribir el mundo, me pongo a escribir a las personas que hay en él, me pongo a escribir lo bueno que muestran y lo malo también. Busco, a veces, nuevos sueños. 

 

PARACAÍDAS 

Juguemos entonces basketball como si nada sucediera.  

En un día normal como cualquiera, él llego a la Secundaria. Un poco tarde eso sí, quizá porque todo lo que venía cargando hacía más lento su paso. Caminó, directamente por el patio hasta que llegó al centro de la cancha. 

Ustedes no pueden imaginar lo difícil que resulta jugar basketball y futbol al mismo tiempo en una sola cancha. Más aún, con una persona que carga un lío tan grande y se coloca justamente en el centro del espacio. 

¿Why we should stop the game? We can do that, and so much other things, so much better. Just let us do that, and trust in the result. No one wound, no one hurt, no one out. Everybody running, sweating, yelling, playing, feeling the life in the edge of our skins. All that life in the edge of the skin, like if we were falling between stars on each moment of triumph. No matter if this moment of winning is a score, an annotation, a goal, a word that I say or that I heard. A moment when we know we are the essential part of something important. When we know we are part of the life, and not just an useless part to show like a bad example or good example. We are not that. We are just us, in a plenty moment of present. Show us a guide, a way, a door, an option, not a recrimination. Show us something powerful. Show us an example. 

I really hate the English class. 

En mitad de la cancha, en el inicio de lo que sería un día difícil, se plantó con su lío sin prestarle atención a ninguno de nosotros. Como siempre y como en todos, la vida se sucedía a su alrededor, más rápida, más viva, más centelleante y por la tanto más fugaz que nunca. 

Paren el balón. 

Algo importante está a punto de suceder. 

Ese lío, era un amasijo de tela, de cuerdas, de parches en algunas partes. El nylon impregnó el ambiente y procedió con minuciosidad mientras todos le observábamos. 

Cae en Altamira por lo general el sol como plomada, aunque excepcionalmente en aquella mañana, una lluvia repentina había cuajado en charcos las miradas. Luego de la lluvia, un cielo gris que oculta al rayo, evitaba el pertinaz golpe del sol con toda la calidez de sus ardientes rayos. 

Las pieles reconfortadas en el fresco que anunciaba ya el otoño, se expandían libres bajo los uniformes.  

Ellos, color caqui en pantalones y camisas. Cinturón. Zapatos negros. A veces tenis. Cinturón de tela y la letra de tu grupo bordada en la manga. Existen variantes en lo que a primera vista, se mira igual. 

Ellas, dependiendo el grado es el color. Rosa para primero. Azul para segundo. Escarlata, rojo oscuro, una especie de vino amargo para tercero. Calcetas. Tenis. Zapatos negros. Cinturón de tela al color del jumper. Rosa para primero. Azul para segundo. Escarlata, rojo oscuro, una especie de vino amargo para tercero. Existen variantes en lo que a primera vista, se mira igual. 

Así las pieles, un viento suave barría la cancha. 

Con meticulosidad se desenredaban cuerdas, se extendían pliegues, se conformaban nuevas geometrías. 

En el cielo, barruntos. 

En el cielo, una súbita división provocada por los rayos solares tratando de abrirse paso entre los grises y zonas cada vez más amplias de un cielo limpio, claro, azuladamente cristalino. 

Lluvia suave. Refrescante. 

Un arcoíris, de colores firmes, muy firmes, arco perfectamente definido. Inesperado dibujo de solares esperanzas 

 

CANTO I 

Ixchel ya sabía lo que pasaba. Lo habló mucho con ella, pero ella no le había creído. 

Si Dani hubiera sabido lo que aquella mañana ocurriría, le habría prestado a Ixchel al menos su impermeable. 

Si Ixchel hubiera sabido lo que aquella mañana ocurriría, no habría salido de su casa con los zapatos nuevos. 

Los zapatos se mojaron. Ixchel se enfureció. La torpe necedad de su mamá. - Está lloviendo. – le gritó desde la entrada, pero sólo obtuvo por respuesta – Ahorita se pasa. – desde el cuartito con techo de lámina habilitado por cocina. 

Las botas eran el problema. Que ya basta de esas botas. Que pareces hombre. Que un poco más largas las agujetas y te anudarías esas botas desde el cuello. Que por qué la obsesión con esas botas negras, si tan bonitos que eran los zapatos bajos para llevarlos a la escuela. 

- ¡Me voy a empapar! – 

¿Sabes qué? Me vale, me voy a cambiar estos jodidos zapatos porque ya se me mojaron los pies y con las botas los traería bien secos. Me choca mojarme los pies. Después me voy a enfermar y me vas a estar gritoneando que porque no me cuido. Así que no des lata y déjame calzarme con lo que yo quiera. Y no le voy a pedir el impermeable a Dani. De arriba me seco pronto. El problema son los pies. Todo está en los pies. 

Si hubiera sabido que ya estaba en la escuela, a esa hora, en medio de la cancha, no hubiera regresado por las Doctor Martens. Habría corrido sin detenerme. Habría subido al camión. Habría pagado con feria. Habría llegado a tiempo con los zapatos mojados pero la voluntad intacta para decirle ¿estás seguro de lo que estás haciendo? 

No llegué. No me arrepiento del todo. Sin embargo, admito que lo extraño. 

De vez en cuando Ixchel se queda mirando hacia el infinito. Busca algo por encima del azul del día y de la negra noche. 

Seguirá haciéndolo hasta el final de sus días. 

Seguiremos haciéndolo nosotros también, de vez en cuando, sin decirle a nadie porque lo hacemos. 

Los minutos pasaron y aquel lío de cuerdas se compactó, se compactó, se compactó, hábilmente compactado por los manos diestras, claramente entrenadas de… ¿alguien recuerda como se llamaba? 

Número ocupado. El Director sigue marcando. 

No hay explicación alguna. A las cosas y a las personas, a veces les da sólo por suceder. 

Quisiera entrar a la Marina. Yo quisiera ser militar. Quisiera estudiar criminología. Tal vez ser abogada. Ingeniero. Alguien en la vida. Alcanzar mis sueños. Ir a donde ellos me quieran llevar. No hay biólogo marino en la ciudad en dónde vivo. Mecatrónica o algo relacionado con robots. ¿Ya les dije que quiero ser piloto aviador? 

El viento mientras tanto, se hace cada vez más y más presente. 

Se convierte en algo más que fresco. Algo más que viento. 

Sólo necesito tiempo y un poco de paciencia.  

El tiempo ya pasó.  

La paciencia ya la tuve. 

Aquí está ya el viento. 

Ante la mirada de todos, en aquel momento convertidos en uno solo, comenzó lo que recordaríamos por el resto de nuestras vidas. 

Fue eso.  

Precisamente eso. 

 

EPÍLOGO 

Una mochila de aproximadamente 12 kilos. Tal vez más. Tal vez menos. 

Contar hasta tres y jalar de la cuerda. 

Una ráfaga de viento. 

Una poderosa ráfaga de viento. 

Una ráfaga de viento hinchando el extenso velamen ante atónitas miradas y comenzó a elevarse.  

Tirado hacia arriba por una fuerza nunca vista, subió hacia las estrellas en un paracaídas convertido en parasubidas. 

- Maestra ¿Este es el libro que vamos a leer? - 

- Sí. Fue escrito hace más de 80 años. – 

- ¿Lo vamos a leer todo? – 

- Lean un poco y céntrense en las partes que les gusten – 

Altazor. 

Comenzó a elevarse, Huidobrianamente poseído por un ímpetu de voz hallada entre las hojas de lo leído. 

Puedo lograr lo que me proponga. No soy más ni menos que nadie. No soy igual pero tampoco diferente. Solo soy mientras me elevo. Solo soy esto que ves. 

Mírenme y mírense.  

Decididos como estamos, podemos ir más allá de lo que nos rodea. Por encima de quienes no escuchan nuestra voz o por encima de quienes creen que estamos perdidos. 

Ocupamos un lugar en el espacio y podemos ocupar un lugar entre las estrellas. 

Somos Altazores y tomamos la decisión de nuestras vidas con cada paso que lanzamos al infinito abismo de la existencia. 

¿Puede alguien juzgar lo que no ha construido? Construye conmigo entonces. 

Dame un paracaídas y enséñame también a usarlo. 

Todo va en picada pero yo no quiero caer así. Yo quiero subir. 

Ayúdame como el viento lo hace. 

Si he de caer, que sea desde las estrellas. 

Estoy dispuesto a las consecuencias, si me muestras el camino de tus actos. Y si por encima de ello, me aplasta una realidad que no puedo controlar, ayúdame tú, quien quiera que seas, quien quiera escucharme, para construir este paracaídas. 

Seremos llamados Altazores, porque estuvimos dispuestos a subir, y de ser necesario, dispuestos a caer desde los astros. 

En un viaje fantástico, impulsado por el viento. 

Altazor morirás. 

Se secará tu voz y serás invisible 

La Tierra seguirá girando sobre su órbita precisa 

Temerosa de un traspié como el equilibrista sobre el alambre que ata las miradas del pavor 

En vano buscas ojo enloquecido 

No hay puerta de salida y el viento desplaza los planetas 

Piensas que no importa caer eternamente  

si se logra escapar. 

Cada vez son más los jóvenes que llegan a la escuela, escondiendo paracaídas en las enormes mochilas que llevan cargando en las espaldas. 

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